miércoles, 31 de octubre de 2012

La felicidad a modo de barco

Sin nubes a la vista navego por un mar de vida en el que abunda la sal,  realmente estoy contento, ya que ni las rocas que elevan su grandeza alrededor mio ni las vicisitudes del viento agravian mi embarcación que marcha firme y segura. El miedo es de otro mundo, es para otros, yo no lo tengo, no lo conozco en este momento, soy el ser mas valiente del mundo y el universo entero. Todo sale bien sin tener que mover un dedo, afortunado navegante de la vida y el mar ¿Y quien osara interponerse en mi camino tan orgulloso y ancho como la sonrisa de un niño?
El suave viento que acaricia mis cabellos, cierro los ojos e imagino un mundo, uno donde la dicha que siento en este momento sea colectiva entre los navegantes y no individual. Sueño con mares donde el rumbo de las embarcaciones sea recto como el mio, o el de otros que tan afortunados como yo. Pero entonces me estrello, no sin antes vislumbrarlo, el océano negro de aquellos ojos, las estrellas cálidas que me llaman a la perdición en un abismo de rocas de olvido, no existe el frio allí, solo dulces voces. Con el rostro risueño mantengo el rumbo hacia mi destrucción, olvido los finos pensamientos que intentaba proteger en en la mente, el timón acaricia mis manos indicándome que ya no tengo el control del barco, mis brazos se duermen, vuelo al olvido, del que no quiero regresar, pero entonces ¿De que valen mi antiguas y lejanas ideas, sino es para tapar la verdadera necesidad que siento por aquel oscuro océano que se me ofrece entero frente a mi persona? Repito esta pregunta varias veces en mi mente, antes de estrellarme y perderme en la penumbra.

miércoles, 17 de octubre de 2012

El asesino mundialista

La conmoción en la sociedad provocada por una simple nota periodistica de aquella epoca, no paso inadvertida frente a los ojos de los medios mas amarillistas, quienes no tardaron en ponerle un nombre al asesino serial del momento, lo llamaron "el asesino mundialista". Este nombre se debía al modus operandi del cruel asesino, quien aprovechaba el poco movimiento y atención de la gente durante los partidos de la selección nacional en los mundiales de futbol para entrar a las casas y asesinar sin motivo aparente a sus residentes.
Los asesinatos volvían a repetirse cada 4 años, cuando volvía la competencia mundial a copar las mentes y las vidas de los habitantes por un mes mas. La población se hallaba estremecida, al punto de llegar a temer los mundiales, sobre todo ahora que los medios habían informado que no solo asesinaba, sino que según recientes investigaciones, también torturaba y con bastante saña. Los mas curioso era su habilidad para no dejar huellas que lo incriminen, por lo que no había sospechosos o prueba alguna que pudieran acercar a los investigadores policiales a el descubrimiento de este misterio.
¿Cual es el móvil del "asesino mundialista? Preguntaban los diarios en algunas tapas, donde expertos en criminología y otras materias opinaban sobre lo que no sabían con una precision matematica, como si conocieran al asesino, y supieran sus motivos para operar del modo en que lo hacia, pero todos decían cosas distintas. De todos modos los diarios salieron beneficiados en ventas, sacando al publico sus famosas ediciones donde daban los consejos mas importantes para que sus lectores evitaran ser asesinados, como ser mas cuidadoso, de que modo trabar la puerta durante un partido del mundial, que estaba próximo a comenzar.
Un mes mas tarde, luego de que aquellas recomendaciones salieran a la venta en los diarios, el mundial comenzó indefectiblemente y la psicosis colectiva se acrecentó al punto de que el 90% de la ciudad no vio los partidos de la selección nacional, atrincherándose en sus casas, levantando barricadas tras las puertas. La venta de armas bajo registro tuvo una venta record en aquellos días, sin mencionar el record que tuvo seguramente el mercado negro de armamento. Se podía observar también policías nerviosos, viendo en cada transeúnte un enemigo o posible sospechoso, con la mano en la culata del revolver, esperando el momento justo para iniciar una carnicería.
Tan fuerte fue el impacto en la ciudad sobre este asesino, que las emisoras locales de televisión y radio, se auto-impusieron no transmitir ningún partido del mundial de futbol que transcurría en ese momento.
El torneo de futbol continuaba su rumbo, ignorado por los atemorizados ciudadanos de aquella urbe acorralada por el miedo. Esto continuo así hasta el fin del mundial, cuando uno de los supuestos asesinados por el "mundialista" revivió (O nunca murió mejor dicho) y confeso que se sentía utilizado por los medios para infundir temor en la población, que en un principio estuvo de acuerdo en prestar su nombre y su rostro para una foto donde el aparecía totalmente desangrado sobre el suelo de su casa. El diario le había pagado bastante bien y continuo su vida, pero se hacia muy difícil vivir tan lejos de su ciudad de la cual le habían obligado a marcharse para cumplir bien su rol de "muerto". Acuso a los medios de tener un acuerdo con los policías que supuestamente habían estado en "las escenas del crimen" dejadas por el mundialista. A partir de ese momento comenzaron a revivir mas testigos que afirmaban la inexistencia del cruel asesino, sino que se trataba de una estrategia  para subir las ventas cada vez mas venidas a menos de los medios gráficos.
Además algunos de los testigos afirmaron saber de buena fuente que los medios ya preparaban una expansión de las fronteras del mundialista en sus asesinatos, realizándolos en otras ciudades y regiones.
La población entera estallo en furia, pidiéndole explicaciones a los dueños de los medios, quienes jamás dieron una respuesta clara o concisa. 
Pero lo que enojo a la población, lo que le dolió mas que nada, no fueron las mentiras, sino una de sus consecuencias, la ciudad se había perdido de ver los partidos del equipo nacional, el cual habia gestado en aquel mundial una campaña historica sin derrotas y habia logrado ser campeon del mundo al fin, luego de 28 largos años.







Mantenerse al margen es un crimen

Estar al margen de los procesos de evolución política y social que vive en la actualidad la Argentina, no tomar partido de alguna de las dos posiciones es un crimen. En este presente tenemos a dos corrientes, la derecha liberal mas salvaje y anticuada, nostálgica de los años 90 o podría arriesgarme un poco mas y decir que un porcentaje de esa derecha añora viejas dictaduras y opresiones. Por el otro lado tenemos una derecha progresista, una que en cierto modo, no tiene un tono tan "derechoso". A mi entender esta derecha que cede ante el progreso, es el impulso a una futura nueva política, una política nueva que ya no será socialismo o capitalismo y excede al Peronismo inclusive, este movimiento que paso a paso se transforma en una nueva política popular, una cultura distinta, una cultura reformada a base de la solidaridad y el pensamiento colectivo. Una política donde todos sean parte, extranjeros, argentinos, opositores. Una política de justicia para los mas débiles y los mas necesitados, para con los trabajadores, una política que cada día mas reconoce estar persiguiendo la igualdad. Tuve que llamarla yo derecha progresista, ya que aun depende de ese titulo, depende de ciertas formas y procesos que refieren a la derecha, pero de derecha solo conserva su nombre.
Ya no hay tintes grises, no deben haber posturas tibias y apolíticas, porque es estar jugando inconscientemente con una postura u otra, al mantenerse al margen o en el estado de desinteresado, somos propensos a ser utilizados, de hecho, el mito de la postura apolítica debe ser destruido de una vez, siempre nos inclinaremos por un lado mas que por el otro. Es hora de dejar la hipocresía y el desinterés, porque eso, en el presente, es un crimen.

lunes, 15 de octubre de 2012

Compañero y amigo


Es complicado el sentimiento de extrañar a quien no se conoce, de conocer cada uno de sus detalles como si fuéramos hermanos, pero sin embargo, no serlo. Yo comparto tu sangre al igual que muchos millones, sin ser en nada familiar de tu familia. En cierto modo, nuestra lucha es la misma, cambiamos la metodología, pero seguimos adelante, esforzándonos en aprender de los errores del pasado, de entender lo que nos dejo tu muerte, un vacío gigante que aun sigue vigente en el corazón de los que nacieron mucho después de aquel trágico día. 
Seguimos de duelo amigo, y aunque pasaron algunos días del aniversario de tu ida de este mundo, yo te escribo hoy, porque siempre es bueno recordarte, para seguir queriéndote.
Siento orgullo de pertenecer a tu bando, hermano, porque tu bando es el que elegimos miles de personas que tomamos tu ejemplo y tu bandera. Siento orgullo de sentir que mientras mantenga tu recuerdo vigente, jamás podre pertenecer al bando de enfrente, al de la oscuridad, al del imperio asesino y esclavizador.

Lamentablemente hoy vivimos en un mundo muy diferente al que soñaste y deseaste con el ardor de tu vida, pero seguimos de pie, seguimos ganando, porque sabemos que al tirano le molesta tu recuerdo, sabemos que aborrece nuestra continua lucha, y eso, quiere decir que vamos venciendo de a poco al asesino de pueblos, porque si no le molestara lo que hacemos, lo que pensamos, lo que decimos, seriamos parte de el, y yo, no te estaría escribiendo estas humildes palabras.

HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!

sábado, 13 de octubre de 2012

Aristea Spiralis


Hubo en mi vida cierta vez, un largo periodo de obsesion por todo lo relacionado a la Botánica, obsesion que consumió mis proyectos anteriores para dedicarme de lleno al estudio de dicha materia. Llegue a recibirme en muy pocos años dada mi avidez de conocimiento y muy poco tiempo despues de haber terminado los estudios me encontré trabajando como profesor en la universidad de mi ciudad en la que pasaba además largas horas estudiando en la biblioteca del lugar y en su completo laboratorio, en el cual me encerraba a observar felizmente aquello que me apasionaba con locura.
Mi familia, la cual se componía de dos hijos y una hermosa esposa, me apoyaban en todos mis proyectos y eso me animaba a seguir adelante con mi  curiosidad de niño. Era feliz en cierto modo, pero por otra parte, mi obsesión me impedía serlo completamente,  siempre me encontraba yo insatisfecho.
Cierto día, uno de mis colegas de la cátedra en la universidad, Mateo, quien hace poco había regresado de un viaje del África, me obsequio una semilla extraña, de la especie de flor 
Aristea Spiralis, la cual me contó, era muy extraña y dificil de conseguir. De por si la semilla tenia una forma extraña, y de un color rojo intenso, era raro, ya que no era el color que  le conocia por fotografia a esa flor. Yo apreciaba a Mateo, era un buen hombre, y siempre se dirigía hacia mi con respeto, no parecia molestarle en lo mas minimo que mi cargo fuese mas elevado que el suyo, pese a mi corta edad.

En mi frenesi de investigar algo nuevo para mi, corrí a mi hogar para poder plantar aquella semilla en el vivero que tenia yo en mi casa, donde me dedicaba a la investigación. Una vez enterrada en la húmeda tierra, me marche muy alegre a cena.
Sorpresa y curiosidad fueron las sensacion que experimente cuando a la mañana siguiente, encontré que donde había plantado la semilla, había un pequeño tallo. La rapidez con la que se había gestado aquel tallo era inusual, y no me preocupo igualmente la anormalidad de aquel evento, estaba viendo algo que muy pocos podian, era testigo de un fenomeno natural.
Transcurrieron los días, sin dejar de crecer, la flor crecía conforme a su hermosura, era gigante y sus petalos eran de un color rojo intenso, lo cual era curioso, por lo poco que conocía yo de aquella semilla, el color debia ser turquesa o de un color mas del tipo violaceo, pero poco me interesaba, solo me limitaba a contemplar su belleza, no tenia ojos para otra cosa, ni pensamientos para otras molestas cuestiones.
Pasadas ya un par de semanas, en las cuales seguí con atención cada cambio, anotándolo y observando. Hasta que descubrí aquel detalle, aquella figura en sus petalos anormales y gigantescos de color rojo, que me quito la respiración, y mis ganas de seguir investigando cualquier cuestion que se relacionara con la botánica, fue inmenso el miedo que senti cuando encontre aquella mañana, en sus hojas un extraño dibujo, eran rostros horrendos, como mascaras de la muerte, dibujadas en cada una de sus enorme petalos de color rojo oscuro. En un principio reprendí a mis hijas por haber estado jugando en mi vivero, y haber dibujado esos horrores sobre mi material de estudio, pero aquello no era un dibujo echo por el ser humano, eran dibujos de un carácter maligno, como yo nunca había visto, no creo que tal horror viniera de la naturaleza, de seguro era  alguna tenebrosa malformación de la semilla producida por una cruel mente humana. Pese a todo esto, no me atreví a hacerle nada a aquel espécimen de flor.
Al fin, un dia despues, logre juntar coraje para observar aquellas caras dibujadas, pude notar que todas ellas eran tristes, con sus facciones enjutas, y deformes, como  demonios de pinturas en tiempos lejanos ¿Que escondian en esa tristeza maldita repleta de fealdad? Esos eran algunos de los interrogantes que pasaban por mi mente en aquellos días, pero poco podría averiguar yo, ningún libro conocido por mi trataba sobre este tema, y cuando acudí con mis dudas a Mateo, tampoco supo decirme, aunque para mi gusto, tomo el tema con demasiada ligereza, sin creerme o tratándome de exagerado, lo que me irrito bastante debo admitir.
Mi relato entonces, llega a aquella noche, cuando volvía de dar mis clases en la universidad, y como era costumbre, antes de entrar a mi casa, solía ir al vivero y ver como estaba todo, una costumbre alimentada por mi obsesión. Esa noche, llegaba con un mal presentimiento, el cual deseche con algunos tragos de camino al hogar, pero todo el embotamiento del alcohol, lo poco mareado que me hallaba, se diluyo cuando observe los terribles petalos rojos del ahora, arbol-flor, fruto de aquella asquerosa semilla. Las caras sobre sus petalos habian cambiado, ya no mostraban expresiones tristes, sino que eran felices, un gesto de demoniaca felicidad poblabla aquellos rostros regordetes y malformados, un miedo intenso se apodero de mi, ¿Temía acaso una mano oscura sobre mi hombro, en las penumbras de mi vivero?  ¿Temía acaso que aquellas caras infladas de un enfermo fervor me asaltaran de pronto? Corrí hacia la puerta de mi casa, sudando y tembloroso, como bajo un efecto febril. El espectaculo dantesco que me aguardaba cruzando la puerta nunca mas lo olvidares ni nadie olvidara mi grito de desesperacion, cuando descubrí a mi familia en medio de un océano de sangre, con la destrucción de cada trozo de sus vidas esparcidos por toda la casa y con aquella sangre, en la pared, algun ser horrendo habia dibujado aquellas mismas caras de los petalos de la "Spiralis". Ahora podía ver con claridad, el porque de aquel desenlace macabro, en mi dolor solo pude pronunciar un nombre, aquel que recuerdo cada día de mi penosa vida en esta celda, aquel que susurro una maldicion sobre la semilla entre dientes, mascando envidia, odio y rabia, aquel que me quito lo que yo mas amaba. Todos mis pensamientos mas oscuros se arremolinan ahora alrededor de una sola persona, solamente un  nombre: Mateo

miércoles, 10 de octubre de 2012

Reflexion de Miercoles

¿Cual es el sentido de la vida? La pregunta mas repetida y enigmática de todas de las que quizás frecuentemos, hasta puede ser que a veces se la use como broma o para llamar al silencio a algún sabelotodo que pretende responder con soberbia las preguntas que se le formulan.
Claro que podemos elaborar respuestas acordes a nuestro pensamiento o idealismo vigente, por eso voy a elaborar mi propia respuesta aquí mismo (Con una concepción muy personal)  de esta cuestión que según mi parecer se encuentra con múltiples soluciones.
En un principio se me ocurrió que el sentido de vivir era simplemente estar vivo, porque muerto, sentido no podremos encontrarle a nuestra existencia, en fin, lo primordial y lo mas importante para el ser humano es permanecer con vida, sabemos que el hombre con tal de no morir es capaz de llegar a los puntos mas bajos de humillación, hasta aferrarse a los pocos minutos que le queden a cualquier costo.
Pero como sabemos la vida no es tan simple, no se reduce solamente al verbo "Existir", sino que es una vida compleja, plagada de situaciones sociales y políticas diferentes, pensamiento, anhelos y deseos individuales.
Puedo entender de esto entonces que la vida del hombre posee varios sentidos, además del simple hecho de vivir, ya que el hombre es un ser complejo, un ser "pensante" y debe darle anhelos a su vida para no perder la fe ni la esperanza, buscando algo mas que lo diferencie de los animales, los cuales se limitan a sobrevivir y preservarse, Este sentido es el sentido personal que cada individuo le da a su existencia. Podría poner algunos ejemplos: Ciertas personas encontraran el sentido de sus vidas en una mujer con la que pasar el resto de sus día, otros encontraran el sentido de su vida ayudando a los mas necesitados, otros encontraran su sentido en la religión, etc.
En fin, el sentido primordial de nuestro pasar por el mundo, es el que nosotros mismos le damos o soñamos, nada tan simple como eso.
La pregunta creo entonces mas importante luego de cumplir el primer paso, que es vivir, entonces no es ¿Cual es el sentido de la vida? Sino ¿Que sentido queremos darle a nuestra vida?

Sobre el exceso de cafe

Tenia yo cierta vez una adicción por la cosa mas asquerosa que puede existir, el café de maquina. Esa sustancia que se derrama como (Y perdonen la expresión) excremento liquido en un pequeño recipiente que pretende ser algo así como un vaso, esa sustancia de color oscuro a la cual podría yo inventarle cientos de nombres, pero no se me ocurriría jamás llamarla CAFÉ. Aun así, esa repugnante bebida producía un intenso deseo en mí de consumir mas y mas de aquel brebaje. Se me ocurría a veces, que  tuviera algún agregado secreto que produjera aquella terrible y no tan chistosa adicción, ya que con un poco de aquel liquido en mi organismo, retomaba mis labores de oficina con mas animosidad, y no por el simple efecto de la cafeína, era otra la sensación, confusa, trabajaba yo contento (Claro ¿Que clase de persona que desee llamarse a si misma, normal, trabaja contenta?) Aunque al rato se escurría aquella sensación de bienestar del cuerpo, y he aquí que ya me encontraba en la fila nuevamente para conseguir mas café (Si, siempre había fila) 
En aquellos días, el personal entero de la empresa  se hallaba totalmente sometido al poder hipnótico de la terrible maquina de café, puede reirse usted, pero era así, exactamente como yo se lo cuento. Realmente volver al hogar con los pensamientos sumidos en el consumo de café no era sano,  y tampoco creo que fuera sana aquella espuma no del todo clara en su consistencia, y aun ahora hablando de ella y teniendo en cuenta los sucesos posteriores, sigo teniendo ganas de probar un poco de aquella sustancia.
 En los pocos momentos en que podía pensar con claridad sobre el asunto, era de noche, desintoxicado a medias, cuando casi podía asegurar que nuestros jefes en la oficina nos mantenían estupidizados a base de la ingesta de café con algún ingrediente extra seguramente agregado, para efectivizar nuestro trabajo, el cual ultimamente había repuntado mucho, gracias a nuestras inevitables ganas de trabajar duro y hacer horas extras.
No voy a extenderme mucho mas sobre detalles menores del curioso caso del café, investigado por la policía hasta el día de hoy, que sigue intentando develar los misteriosos detalles que desencadenaron los sucesos  exageradamente trágicos que voy a relatar a continuación. Como único superviviente de aquella tragedia, debo hacer una confesión antes que nada: Fue todo culpa mía. Y claro que lo fue, si yo averié aquella infernal maquina (Sin intención de hacerlo claro) que parecía sonreírse burlonamente de mi, desde aquella esquina, sin develarme su secreto, yo fui quien que tomo conciencia de que algo extraño ocurría, y esta confesión queda aquí sellada, en este corto relato, jamás tuve el valor de compartir esto con la policía ni a nadie, realmente no es mi intención meterme en problemas a mi edad, soy una persona normal, que necesita confesar que un grado de culpabilidad tiene, pero solamente mínima, aunque pensar esto, quizá sea solo consuelo propio, usted sabrá juzgar mejor tal vez.
Aquel día trágico me levante decidido a hacer lo que debía hace tanto tiempo, descubrir aquel secreto adictivo que me mantenía esclavo del trabajo.
En la hora del almuerzo, me quede un poco mas simulando trabajar, no tenia demasiado tiempo, ya que el descanso se había acortado de una hora a solo 10 minutos, de forma voluntaria por los empleados, que volvían desesperados a consumir mas café.
Abrí la maquina, con cuidado y comencé a revisar sus compartimientos, intentando encontrar algo que incrimine a aquellos malditos de mis jefes, que nos mantenían atontados para incrementar sus ganancias. Basta decir que nada encontré, y comencé a sentir los pasos en la escalera de la oficina, rápidamente cerré la tapa de la maquina, y me senté muy tranquilo a continuar mi trabajo, como si nada hubiese pasado. El primero en cruzar la puerta de entrada, fue el idiota del sector de cobranzas, quien, mirándome con recelo, fue hasta la maquina, debía pensar que había permanecido trabajando para tomar mas que nadie. Pero no, yo estaba lucido, desintoxicado y mas vago para trabajar que nunca. Así comenzaron a llegar mas personas a la oficina, apresuradas, haciendo la fila para el café, con sus rostros petrificados en ansiedad. Que espectáculo tan horroroso y comico a la vez, como si hubiesen salido todos de una rápida lobotomía en diez minutos. Así comenzaron a sacar algunos pequeños vasos llenos de aquella porquería, cuando se pudo oír una pequeña explosión, y la maquina opresora de voluntades, comenzó a temblar. Antes que nadie pudiera decir nada ni quejarse el liquido caliente volaba por los aires quemando a algunos, a otros les caía en las ropas, en fin, una autentica lluvia de café. No pude evitar reírme de la situación por unos instantes sin imaginar el horror que me esperaba como testigo a continuación. Descontrolados los que no habían llegado a sacar café se abalanzaron sobre las personas salpicadas del liquido marrón, y comenzaron a morder como perros rabiosos, las zonas manchadas de sus cuerpos. Si no soy lo suficientemente claro, es por el horror que me trae el recuerdo de aquellos instantes, en fin, se estaban almorzando los unos a los otros, y el café seguía brotando de la maquina sin parar, y el tumulto de aquellas personas poseídas por una rabia caníbal lo  destruía todo, algunos corrían en círculos gritando con voces que poco se asemejaban a las de un ser humano, otros se mordían a si mismos, otros peleaban por colocar  el rostro en el café que salía en chorros e hirviendo de la temblorosa maquina. Aquella locura que transcurría en cámara lenta frente a mis ojos fue demasiado para mi, lentamente me dirigí a la puerta de salida para no llamar la atención, y una vez afuera eche a correr, sin mirar atrás, sin pensar a donde, solo corrí.
Cuando la policía acudió al edificio de mi trabajo alertada por los trabajadores de las oficinas cercanas, se encontraron con aquel atroz panorama, no muy fácil de describir. Los empleados habían acabado de comerse entre ellos, ya que la mayoría o se encontraban muertos, o caídos en el suelo, sin chances de moverse, bebiendo el café del suelo, gritando, aullando, gimiendo.
Como es obvio, hasta el día de hoy no he probado un poco de café, soy libre de aquella sustancia, pero de vez en cuando, y no lo puedo negar, disfruto ahora de un buen té hecho en mi casa con agua cuidadosamente purificada. Mi esposa dice que me he convertido en un paranoico, pero, usted lo sabe ahora, nunca hay que confiarse.