viernes, 9 de noviembre de 2012

Contradicciones, cada dia...

Confusión, odio, ignorancia y un poco de ingenuidad. Esa es la impresión de contenidos que deja la marcha del día de ayer (8 de Noviembre) en mi.  No me gusta criticar a gente que se manifiesta, ya que su derecho a hacerlo es totalmente valido, no es criticable esa acción, no me confunda lector. Critico la falta de motivos o simplemente la motivación apolítica. Hace un tiempo en este mismo blog escribí que ser apolítico es contraproducente en estos tiempos, un apolítico no construye, una persona que no se define en una posición clara, no genera ideas, solo quejas sin aportar, aunque sea, un pequeño grano de arena para solucionar aquel problema que le molesta.
Me podrán decir que la protesta tuvo sus motivaciones, podrán hablarme sobre la inseguridad, sobre la inflación, sobre los planes sociales que este gobierno entrega a la gente de mas bajos recursos. Puedo responder con mucha seguridad desde mi humilde posición que no son esos los motivos reales por los que estában ayer ahí. Son clichés mediocres de gente que no le interesa en lo mas mínimo aquellas cuestiones, son puntos esgruimidos por los medios de comunicacion, repetidos una y otra vez , erguidos en contradicciones y confusiones. Estos puntos tan contradictorios son los que ha inculcado en esta gente el poder de las corporaciones monopólicas que lamentablemente aun siguen vigentes en el país, para tapar su verdadero reclamo, para poder tapar sus propios miedos de perder el manojo, la tajada que se llevaban cómodamente hasta ahora. Se les acaba el tiempo y su miedo crece cada día más, están asustados y utilizan a la gente, generan el caos, generan el temor.
¿Que mejor manera de acabar con la delincuencia y la inseguridad si no es brindando educación, trabajo, salud integración? ¿No es una contradicción reclamar por seguridad al único gobierno que se ha encargado seriamente de este tema? ¿No es contradictorio reclamar seguridad y al mismo tiempo reclamar la quita de la dignidad a los mas pobres? ¿No es una contradicción pedir libertad a quien jamás te censuro? ¿No es una contradicción protestar en contra de la censura cuando la misma protesta fue fogueada por los medios opositores? ¿No es irónico que salgan a protestar personas que en la época del peor vaciamiento del país cerraron sus ojos y vieron hacia otro lado? Cuando miles de persona quedaban si sus puestos de trabajo en la infame década de los 90, cuando miles de niños quedaron viviendo al aire libre de la calle para que algunos privilegiados de clase media y clase media alta pudiesen comprar sus coches, casas y sus pasajes a Cancún  ¿Donde estaban los manifestantes del día de ayer?  Y pido perdón si ofendo a alguien o si mis palabras pueden sonar muy rudas, sepan que no es indignación, sino reafirmación sobre mi posición actual, y por eso les agradezco, porque gracias a los manifestantes del día de ayer, y los agravios proferidos por estos frente a todo el país y el mundo, sé que estoy en el camino correcto. En fin:  “Ladran Sancho, señal que cabalgamos”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario